"...Caminetti resulta fiel a la armonía de colores no sólo en cada pieza, sino también en el conjunto de ellas.  Al equilibrio de las formas al estilo de la regla áurea, el artista suma la armonía cromática que permite combinar todo con todo.

No hay tendencia que no sea respetable, dice Caminetti, pero lo que me resulta respetable por encima de todo, es la apreciación del receptor.  Encontrar las tendencias generales, despojar a la obra del egoísta impulso individual, constituye un acto de contricción y de respeto hacia los demás.

Imprevistamente, esa esencia común a los hombres, no hay que buscarla fuera de uno mismo sino adentro, en lo más profundo.  Después de todo, los hombres nacimos iguales, dice..."

"Caminetti:  pintor que ganó uno d elos primeros premios del XXV Salón Municipal, es un artista que ha tomado seriamente su misión plástica dentro de sus posibilidades naturalistas, ha logrado un cambio fundamental en el concepto pictórico indudablemente que la idea debe concretarse en los cuadros, ha encontrado la fórmula para llevarla a cabo dentro de una ppaleta que a grandes trazos va conformando la composición de color, fuera del paisaje y calles ha encarado el tema difícil de la figura.  Se proyecta en la gama de azules y en los matices y acentos que iluminan su versión, a pesar de ellos este pintor no olvida repetimos, el motivo de composición de la anécdota dictada en su función de pintura el tema aparece sustancialmente comprensible y eficaz, ateno a la modulación de una estructura que no se afirma precisamente en los contornos sinó que toma la atmósfera tratando la síntesis".

Basta una mirada a la exposición de Luis Caminetti en el Paseo de la Matriz y un agradable paseo por el Prado, para comprobar cómo lo natural es impulso para la creación y cómo ésta se aleja aparentemente del objeto primero, para expresarlo con mayor fuerza en obras que ya son otra cosa, son pintura.

Luis Caminetti recuerda que cuando era niño miraba pintar a su tío Alfredo Bustamante, en los fondos de la Quinta de Castro, calles Cáceres y Laguna Merim.  Y cuando presenta si exposición "El Prado y sus vivencias" se refiere a esta influencia primera, y al consejo que recibió del propio Joaquín Torres García que supervisaba las obras de Bustamante y le dijo que siemrpe había que pintar del natural, que la luz daba algo inimitable, cambiaba los valores del color, las formas.

Luis Caminetti ha continuado la lección de Torres García y se encamina al Prado en busca de la calma, la belleza natural, el romanticismo aparentemente olvidado en otras zonas donde dominan los ruidos de la ciudad.  Sus óleos se empastan del lirismo que el pintor pone en las telas;  su sentimiento no está en las flores, en el objeto que es tema de su pintura.  Caminetti utiliza colores que tampoco están en la realidad, colores que levantan la paleta a brillos que son del sentimiento.  Hay influencias del color con que pintaban estos mismos temas los artistas de los años treinta, Blanes Viale, Amézaga, de Herrera.

La abstracción que el pintor hace frente al paisaje le permite geometrizar, valorar, entonar, crear zonas de luz y masas de color que la plasticidad demanda.

El creador de jardines puede parecerse al pintor cuando organiza el color y resuelve plantear en fechas que vaticinan colores para los próximos meses.  La naturaleza obedece otras órdenes, y mientras tanto, sigue dando sus colores.

El arte del jardín y el arte en el jardín.  Arte y naturaleza.  Abstracción y naturalismo.  Las referencias del hombre hacia el entorno, su mirada que va de lo exxterior a lo interior cuando se dispone a expresarse y a crear una obra de arte plástica, se remontan a la prehistoria y mantienen total vigencia del día de hoy".