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Motta, Casimiro
Nació en Salto (Uruguay) en 1922. Se radicó en Minas (Lavalleja, Uruguay).
Sus estudios los realizó con Wilson Amaral en el Taller Amigos del Arte de Minas, donde dicta clases desde el año 1960.
Intervino con sus obras desde el año 1955 en todas las exposiciones de artes plásticas que anualmente realiza Amigos del Arte en la ciudad de Minas (Lavalleja, Uruguay).
Expuso en los Salones de Artes Plásticas del Interior del país donde le fueron adquiridas las obras que a continuación se detallan:
1956- I Salón de Artes Plásticas del Interior, obteniendo Mención.
1958- III Salón de Artes Plásticas del Interior, Mención Concejo Departamental de Río Negro.
1959- IV Salón de Artes Plásticas del Interior, Premio Especial U.T.E.
1962- VI Salón de Artes Plásticas del Interior, Adquisición por José María Cerdeiras.
1963- VII Salón de Artes Plásticas del Interior, Adquisición Banco Industrial y Comercial de San José.
1964- VIII Salón de Artes Plásticas del Interior, Adquisición de una obra.
De la participación en los eventos anuales de la Comisión Nacional de Bellas Artes (Montevideo, Uruguay) cabe destacar las siguientes distinciones:
1959- Premio Francisco Bauzer, Medalla de Bronce.
1962- Premio Banco República, Medalla de Bronce.
1963- Premio Embajada de Francia en Montevideo.
1964- Premio Embajada de Italia en Montevideo, Medalla de Bronce.
Además participó en exposiciones colectivas realizadas por la Comisión Nacional de Bellas Artes en 1960 y 1961: “Algunas Expresiones de la plástica actual”, “Doce artistas uruguayos contemporáneos”, “Desde Blanes a nuestros días”.
En la órbita municipal de Montevideo (Uruguay) fue expositor en los años 1956, 1957, 1958, 1959, 1961 y 1962, habiéndosele adquirido cuadros para el acervo del Museo Juan Manuel Blanes. Realizó numerosas muestras en Montevideo, Punta del Este, Piriápolis, Salto, etc.
En 1968 pasa a integrar la plana estable de la Galería Río de la Plata, sus obras son exhibidas en Estados Unidos, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) adquiere una obra (año 1974); en Israel en una muestra colectiva de pintura uruguaya patrocinada por la Embajada del Uruguay; en Canadá, en Venezuela, su obra se difunde por numerosas vías en España en la Colección Semperé, en Inglaterra Colección Moraskie, en Brasil Colección Landmann, la Galería Hait de New Jersey (USA) adquiere numerosas obras para ser exhibidas en Alemania, en el año 1974.
Expone en Montevideo (Uruguay) en la muestra del VI Congreso Latinoamericano de Psicoterapia de Grupo realizado en el año 1970.
También sus obras se encuentran en colecciones privadas de Chile, Brasil, Argentina, Venezuela, Panamá, Alemania, Estados Unidos, Grecia, Francia, Canadá y España.
Realizó varios murales, entre ellos dos en el Edificio “Degrandi” de la ciudad de Minas (Lavalleja, Uruguay), en mosaico veneciano, año 1964.
Fue seleccionado por el jurado del Premio Banco República para el Concurso del Premio Blanes, año 1966.
Exposiciones:
1955- A 1959, Museo Departamental de San José, Junta Departamental de Rocha, en el Centro Paz y Unión de Maldonado y en la Galería Andreoletti (Uruguay).
1959- Seleccionado para representar al Uruguay en la Primera Muestra Internacional del Museo de Arte Moderno de Punta del Este (Uruguay), exponiendo una selección de pinturas en la Asociación Cristiana de Jóvenes de Piriápolis (Uruguay),
1960- A 1963, expone en la Galería Felman, de Córdoba (Argentina), en la Ciudad de Young (Uruguay), en la Asociación Magisterial de Flores (Uruguay), en la Galería San Martín de Buenos Aires (Argentina), nuevamente en la Galería Andreoletti (Uruguay).
1963- Seleccionado para la Bienal de Jóvenes de París (Francia).
1963- Expone en el Cine Club Canelones (Uruguay).
1970- Participa en dibujo y pintura en CEDAS.
1970- Exposición Artistas Uruguayos, para la muestra del 6º Congreso de Psicoterapia de Grupo en Montevideo (Uruguay).
1971- Pintura en Trinidad, Flores, Juan Lacaze y Galería Río de la Plata, Montevideo (Uruguay).
1972- A 1975, exposición permanente en Galería Río de la Plata, Montevideo y muestras colectivas organizadas por dicha Galería en Salto y Punta del Este.
Bibliografía:
“Panorama actual de la Pintura Uruguaya Contemporánea”, Arq. Fernando García Esteban.
“Plásticos Uruguayos” editado por la Biblioteca del Poder Legislativo.
Juicios Críticos:
“El crítico argentino Prof. Jorge Enrique Villafañe escribió para “La Mañana” en 1961 la siguiente nota:
Poco tiempo hace en la muestra “Doce pintores actuales” llevada a cabo en la Comisión Nacional de Bellas Artes, aludimos a Casimiro Motta el pintor de Minas, dijimos entonces: De sorprendente regularidad y en plena consolidación de una pintura de realización rigurosa, obsesionada por adquirir carácter definitivo.
Sus desarrollos esquemáticos, conducidos por medios sobrios y frecuentemente, depurados, finalizan con rara coherencia. Es un pintor llamado a sobresalir entre los nuevos. El pintor de referencia celebra ahora en la Galería Andreoletti una muestra donde alternan con suerte parecida, el paisaje, la naturaleza muerta y la figura.
El mayor número de telas en esta muestra de ahora, aún siendo poco válida la cronología, permite estimar en el joven pintor un vuelco promisorio, verdadera reacción con su limitada formulación anterior, efectivo enclaustramiento dentro de una tendencia que termina por ser un automatismo. Si algo indica ese vuelco y esa reacción de modo inconfundible, ese algo es la breve serie “Puerto” por la índole de las soluciones. La pintura de este pintor todavía a medio camino, tiende a tornarse, progresivamente, experiencia espiritual propia. Ahí que bordeando todavía, lo que podría llamarse una pintura personal, no deja de tener la suya carácter y sentido suficiente para identificarla.”
Falleció en la ciudad de Montevideo (Uruguay) en 1991.
"Dos Pintores, Dos Estilos: Casimiro Motta y Denry Torres", Diario "El País" (Uruguay).
En la Galería de Arte “El Portón de San Pedro” se ha montado una singular doble exposición: 22 cuadros de Denry Torres en el subsuelo, y otros tantos de Casimiro Motta en el piso superior. He aquí las confesiones de ambos artistas, sobre sus obras y las de aquél con quien comparten la muestra.
Dos pintores de notoria trayectoria vienen exponiendo en forma conjunta, desde el pasado 4 de agosto en Portón de San Pedro. Ellos son Denry Torres y Casimiro Motta.
22 obras de cada uno: Torres pinta boliches de Montevideo; Casimiro Motta exhibe diez años de su labor plástica desde 1965 a 1975.
- No se trata de copias de boliches montevideanos –explica Denry Torres-; busco dar la esencia de esos lugares. Trato de evitar el pintoresquismo; busco dar el hombre corriente. Es un tema viejo, que he cultivado ya.
Por su parte, Motta señala que si bien hay etapas en su obra y, en especial, en el período que muestra, éstas son, desde el punto de vista del pintor, difíciles de determinar. De todas maneras –admite- es una pintura muy plana y con mucha textura.
Mostradores de mármol
Denry Torres, 58, autodidacta de larga y dilatada obra no es afecto a hablar de su arte. Reconoce que su pintura tonal es de paleta baja y que allí pueden encontrarse los vestigios de alguna lejana infuencia del Taller de Torres García. No sé cómo calificar mi manera de pintar, expresa.
Por su parte, Amalia Polleri le ha definido como un artista “que cumple con el difícil desafío de hacer realismo sin hacer naturalismo”. El no comenta el juicio. Y, hablando de sus cuadros en exposición admite: Trato de dar esa atmósfera gris y tediosa de los bares. No se trata de los bares modernos ni aquellos que ya están en vías de extinción. Sino un mundo más corriente, que definen esos largos mostradores de mármol que no tienen mucho carácter.
La necesidad de pintar
Son varias las etapas que ostenta la pintura de Casimiro Motta. El mismo lo señala, aunque aclara que no es consciente d esos períodos que el tiempo y las opiniones ajenas permiten, luego ver con cierta objetividad. Entre 1957 y 1961, tuve un período de aprendizaje del oficio, desde el 61 en adelante, traté de buscar una pintura más personal, más elaborada.
El pintor admite no ser propenso a utilizar colores brillantes. Como Denry torres, piensa que es una ofrma de la influencia del Taller Torres García. Me gusta más –agrega- el contraste de los colores oscuros que el de los colores claros.
El decenio que abarcan los cuadros que exhibe ahora, tiene una constante: los grandes planos. Pero no sé a qué se debe esa manera de pintar –aclara-. Yo recuerdo haber leído que Mairaux decía que el pintor extrae cosas, elementos que no pasan por la conciencia, para plasmarlos en su pintura. En cambio el escritor no, señalaba también. En el caso del escritor, éstos pasaban de la conciencia a la obra de arte. Por esa razón, el pintor es en cierta manera más feliz que el escritor, que el poeta.... Y yo creo –concluye- que es una decisión justa.
Ambos pintores visitan. Asiduamente, las muestras del otro. Así, mientras Motta observaba los cuadros de Denry Torres , éste, en la sala de Motta, señaló a El País de los Domingos, admirativamente: ¡Este es sin duda un gran período de Motta!. No mucho mas tarde, éste diría, en voz baja: Torres está haciendo algo grande con ésta pintura; algo tan grande que él no tiene conciencia de ello.
“Casimiro Motta y el Paisaje”, por Eduardo Vernazza
Un artista serio, de severa contención ante lo superfluo. Que busca la síntesis dentro de un valor de calidades y planos.
En sus telas el paisaje es un solitario rincón generalmente humilde. Sus viejos galpones y ranchos, las paredes grumosas, que con su paleta de ocres va contrastando los cielos grises y azules con la opaca fuerza de los verdes sin transparencia, pero haciendo sentir su firme superficie como pintura.
Invade en sus cuadros cierta desolación. Sin embargo, predomina el calor de los cromatismos. Porque la luz está dada en contraste con fuertes planos de sombras. Entre ese mundo con algo de misterio y mucha subjetividad, Motta desliza el contenido denso de su pintura manejada en una paleta destinada a hacer fluir los matices y los ricos trozos que suponen los logros de sus colores atonados sobre planos oscuros.
Una buena muestra de este pintor muy personal en su interpretación naturalista, al tiempo que dentro de una visión subjetiva sin quitar a ello la sensible aportación del motivo.